La pimienta negra

La Pimienta Negra es una de las especias más ampliamente comercializadas en el mundo.

Fue la pimienta que inspiró a la reina Isabel la Católica a enviar a Colón hacia el oeste. ¿Con qué propósito? Encontrar una ruta más corta para alcanzar la Costa Malabar de la India. Ahí es donde la pimienta se cultiva desde hace miles de años para su uso como especia y por sus propiedades medicinales.

Sus propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y antibacterianas la convierten en muy valiosa  cuando se trata de salud.

La Pimienta negra es el fruto verde entero de la planta Piper nigrum. La pimienta blanca es el fruto maduro de la misma planta eliminando la capa externa.

La pimienta fue rápidamente apreciada porque servía a un propósito culinario importante. No sólo podría agregar sabor a los alimentos, también disimulaba la falta de frescura de un alimento. Esta era una cualidad especialmente importante antes de que se inventaran métodos de refrigeración y conservación eficaces.

La gente toma pimienta negra para el malestar estomacal, la bronquitis y el cáncer. También se aplica directamente sobre la piel para tratar el dolor del nervio (neuralgia) y la sarna. Pimienta blanca a menudo se recomienda para el malestar estomacal, la malaria, el cólera y el cáncer.

La pimienta negra estimula las papilas gustativas de una manera tal que alerta al estómago para aumentar la secreción de ácido clorhídrico, mejorando la digestión.

La Pimienta Negra la encuentras entera o molida. Para conseguir mayor sabor y beneficios para la salud, comprar la pimienta entera y triturar en el momento pues si está molida pierde sus aceites más rápidamente.