Conducir una columna desalineada
Alguna vez hemos visto a alguien con la rueda delantera de la bici entre las piernas intentando alinearla después de una caída. Enderezar el manillar suele ser más difícil así que la opción es circular con el manillar torcido aunque ello incremente el riesgo de volver a tener un accidente.
Después de que tu cuerpo ha sufrido un estrés, por ejemplo, levantaste un gran peso de forma incorrecta, te quedaste dormido en el sofá o pasaste ocho horas sentado frente al ordenador, es probable que tu columna vertebral también se hallé fuera de alineación. Una postura saludable requiere que la cabeza, los hombros, las caderas y los pies estén alineados correctamente para que la columna vertebral pueda mantener la integridad funcional, al igual que el manillar de una bicicleta tiene que alinearse con la horquilla y los neumáticos para poder conducirla con seguridad. Si una parte de una estructura mecánica se desalinea, como tu cabeza no está en equilibrio sobre los hombros o las caderas no están equilibradas sobre los pies, se creará tensión indebida en el resto del sistema y aumenta el riesgo de fallo o situación de crisis.
Si conduciendo una bici con el manillar torcido te sentirías incómodo, imagínate cómo se sienten tus músculos, articulaciones y ligamentos cuando intentan realizar actividades cotidianas, con una columna desalineada. Tal vez las molestias que sientes te están diciendo «… es el momento de visitar al quiropráctico para conseguir enderezar mi columna!»