Testimonio de Emelie

Cuando llegué a la clínica, no podía sentarme a estudiar, ni sentarme en el autobús sin sentir mucho dolor. Era difícil dormir porque me dolía cualquier postura. También tuve muchos dolores de cabeza durante este periodo. Me costaba mucho llevar el día a día como todo el mundo, ya que no podía sentarme. Me dolía la parte superior de la espalda y tenía la sensación de un gran moratón.

Al principio era muy escéptica sobre el tratamiento quiropráctico, pero después de las reseñas de Google quise darle una oportunidad. Tenía que verlo como una inversión en mí misma. Creo que es la mejor inversión que he hecho hasta ahora.

Todavía estoy en proceso de solucionar el problema principal que tengo, pero justo después de 1 mes, mis dolores de cabeza desaparecieron. Desde entonces, nunca he tenido uno, ni siquiera cuando me pongo enferma, lo cual era muy común para mí antes.

Todavía me duele al sentarme, pero ahora se trata más de ciertas posiciones, lo cual es un gran hito para mí. Ahora puedo estudiar tranquilamente y sentarme en el autobús sin querer sentarme de forma extraña o querer llorar. No quiero ni imaginar cómo sería mi vida si no hubiera invertido en esto. Mi día a día es mucho más fácil ahora, gracias a la quiropráctica.

Estoy deseando ver las mejoras que tendré después de más sesiones.